Reseña: El niño que quería matar.

Título: El niño que quería matar.
Autora: Lolita Bosch.
Editorial: La Galera.
Páginas: 120.
Precio: 9'95 euros.

SINOPSIS:
«Me llamo Max, tengo catorce años y tengo más miedo que el resto de los niños. Porque a veces me pasan por la cabeza unas cosas muy extrañas que no sé qué son, de dónde vienen ni para qué sirven. Si es que sirven para algo. Y entonces tengo la sensación de que los otros se dan cuenta de que no soy como ellos y por eso me tienen miedo».


OPINIÓN:
Cuando pedí este libro a la editorial lo hice por lo mucho que me llamaba el título y junto a ello la sinopsis. El día que me llegó el pedido me quedé bastante sorprendida con lo finito que era el libro pues no me había fijado en el número de páginas.
La semana pasada, cansada de estudiar y sabiendo que este libro era cortito, comencé a leerlo y aunque me ha gustado, me esperaba algo diferente.
Como he dicho, es un libro extremadamente rápido de leer por lo que esa misma tarde me lo ventilé pero por falta de tiempo hasta hoy no he podido colgar la reseña.
La historia se basa en los delirios de Max, enfermo de psicosis, por lo que la autora utiliza la repetición de varias frases a lo largo de todo el libro, lo que me llegó a resultar pesado. Pero esto ayuda a que nos introduzcamos más en la piel del personaje y así saber lo mal que el chico lo está pasando.
Aunque no está incluido ni jamás lo estará en mi lista de libros predilectos, ha sido una lectura entretenida y en ciertas partes de la novela te paras a reflexionar sobre la vida misma.
Ah, una cosa más, el libro está recomendado para personas de mayores de 14 años pero sin duda a mí esto me parece una tontería pues la historia no es complicada ni incluye nada que pueda trastornar a los niños, en mi opinión debería ser de como máximo 12 años en adelante.
Si no sabes que leer y buscas algo sencillo, sin personajes elaborados y sin una trama complicada esta es tu novela.

FRASES:
¿Tanto miedo me tenían que habían decidido entre todos encerrarme en algún lugar del que no pudiera volver a salir? ¿No les importaba cómo me sintiera yo?

Notaba el sabor del pánico que me subía por la garganta y lo quería llorar. Como si lo escupiera.

-Me sabe muy mal, mamá.
+¿El qué, Max?
-Ser como soy.

-¿Qué día es hoy? -Y lo pregunto porque no sé qué más decir. Desde hace un tiempo todos los días son iguales y parece que no se acaban, sino que se mezclan los unos a los otros.

Que si a los demás les cuesta entender qué me pasa, no es culpa mía. Sino de ellos.

VALORACIÓN:

¿Qué os ha parecido?

Si lo habéis leído, ¿estáis de acuerdo conmigo?

Y si no.. ¿Le daréis una oportunidad?

¡Dejadlo en los comentarios!

GRACIAS A LA EDITORIAL POR EL EJEMPLAR.